Y las aguas bajaron al nuevo pueblo para hacer posible una historia que avanzó y llega hasta hoy. Aquí uno de esos molinos que propiciaron un avance para la alimentación de nuestros antepasados y que aun perduran, algunos movidos ya no por el agua sino por la electricidad. Muchos siglos que sigue la vida evolucionando y dándonos sufrimientos y alegrias. Una alegría poder compartir con amigos con las nuevas técnicas.